El Alcorcón se dio otro homenaje. Gran partido de los amarillos, que están en racha, por lo menos en casa. Segunda goleada consecutiva en Santo Domingo tras la manita que le endosó a Las Palmas. Y lo más importante, ya no marca sólo Quini. El pichichi alfarero abrió la lata, como siempre, con un gol de killer, un rematador nato que está en estado de gracia. Pero tras ese tanto psicológico (fue en el minuto 45) llegaron los goles de Ángel (trallazo desde la frontal que se cuela dentro), Samuel (de falta directa, al fin le entra una) y Rueda (gran testarazo tras asistencia de Samuel desde el córner).
Pero no sólo de goles vive este Alcorcón. Ayer de nuevo la portería de Manu se quedó a cero. Van cuatro encuentros consecutivos en su casa sin encajar ningun gol, y eso es fundamental para los amarillos. La defensa sólida y sin errores graves, exceptuando el penalti que concedieron en el pico del área en una jugada que no entrañaba un gran peligro. Sin embargo apareció Manu y detuvo a Quique Martín la pena máxima.
Me sorprendieron varios detalles: el primero es que Gerardo se quedó fuera de la convocatoria. El segundo, Carlos Martínez volvió a ver el partido desde el banquillo y van tres encuentros seguidos. El tercero el buen hacer de Alberdi, que le ha cogido el aire a la categoría.
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