lunes, 16 de mayo de 2011

Crónica Alcorcón-Granada del Diario AS



El Granada pospone su fiesta al caer en Alcorcón

Mora, de penalti, y Quini sentenciaron para los alfareros


Aimara G. Gil
La crónica


Granada tenía un gran recuerdo de Santo Domingo. Hace un año los de Fabri cayeron en el fortín amarillo, pero se llevaron el ascenso a Segunda División. Tres puntos ayer hubiera significado para los granadinos certificar matemáticamente su participación en el playoff de ascenso a Primera. Sin embargo, la fiesta ayer fue amarilla. El Alcorcón ya es matemáticamente equipo de Segunda y se ha ganado la licencia para seguir soñando con entrar entre los seis primeros de la clasificación.
El estadio alfarero se vistió de gala, no sólo para celebrar la permanencia, sino para recibir al héroe del ascenso amarillo: Iñigo López. El riojano vivió de todo, insultos, pero también muchos aplausos. 
No tuvo nada que ver este partido con el de hace un año. Alcorcón y Granada ofrecieron una primera parte muy poca vistosa. El juego se desarrolló en el centro del campo y nadie creó ocasiones. El Alcorcón buscó balones largos para crear una segunda jugada. El Granada intentó llegar a Ighalo, sustituto de Geijo, que no conseguía bajar ningún esférico. Fue una jugada aislada la que inclinó la balanza. David Sanz peinó un balón largo hacía el área granadina. Apareció Montañés a la espalda de Nyom y el francés, al ir a despejar, impactó con la cara del castellonense. El colegiado pitó penalti y Mora lo transformó.


Reacción. Tras el descanso, Fabri cambió el esquema del equipo, sacando a Orellana para tener dos delanteros. Esto empujó más al Granada hacía el área amarilla. Pero apareció Eladio. El tercer portero del Alcorcón paró cada embestida rojiblanca con confianza y tranquilidad. Los de Fabri llegaron a encerrar a los amarillos en su área, pero sin puntería. 
No contento con salvar a su equipo, Eladio, además, asistió a Quini, ya en el descuento, con un saque desde su área. El delantero, con un toque sutil, sentenció el encuentro. 
El Alcorcón ya tiene licencia para soñar, mientras que el Granada tendrá que posponer su fiesta del ascenso hasta el viernes...


El Crack: Eladio. El tercer portero amarillo paró todos los ataques granadinos y asistió a Quini para que marcara el segundo gol.

Vaya día: Orellana. El delantero tuvo toda la segunda mitad para demostrar su valía, pero estuvo desaparecido.

Dandy: Montañés. Provocó el penalti del primer gol y fue un puñal por la banda izquierda. Nyom no pudo pararlo.

El duro: Babin. El francés se empleó con dureza para parar al centro del campo de Fabri. Vio la tarjeta amarilla.


Anquela: "Ahora estamos salvados matemáticamente y hay que celebrarlo. En el campo sólo había un jugador que ya hubiera jugado en Segunda, el resto vienen de Segunda B y eso tiene un mérito increíble. Han tardado en adaptarse, pero es de matrícula de honor lo que han hecho. Hemos sabido competir. Eladio lleva todo el año sin ir convocado. Lo ha hecho todo bien y ha dado tranquilidad”. 


Fabri: Este equipo está haciendo una temporada extraordinaria. La fiesta por entrar en el playoff matemáticamente tiene que ser el viernes con los Cármenes lleno. Tiene que ser una olla. Es injusto irse en este partido al descanso con un gol en contra porque fue una jugada aislada. En la segunda parte hemos creado ocasiones de gol pero no ha entrado. El penalti puede ser o no, pero lo ha pitado”. 





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