Sólo Mario resiste del cruce copero de 2010
El Racing 2012-13 no es reconocible ni para su castigada
afición. Tras disputar la UEFA por primera vez en su historia en 2008, lucha
ahora por salir del pozo de Segunda debido a una caída sin frenos propiciada
por una inestabilidad institucional galopante. Todo lo que ha ocurrido en el
club desde entonces se ha derivado de ella. De Portugal a Fabri, pasando por la
vuelta de Marcelino, el fichaje de Cúper, la apuesta de la casa y el descalabro
de Álvaro Cervera. De fichar a Giovani Dos Santos a conformarse con Koné. De
Primera a Segunda. Sin dueño y con una directiva en la que echa una mano José
Campos y dejan pensar a Manolo Sáiz (ex director del equipo ciclista ONCE)…
Los nubarrones de los despachos han sido propiciados por su
dueño (Alí Syed), que sigue en paradero desconocido tras haber dejado a la
entidad desamparada. Pero otros muchos personajes han contribuido a que este
histórico equipo agonice a pocos meses de cumplir su centenario. El concurso de
acreedores continúa su curso, el presidente (Harry) es una marioneta de su
antecesor en el cargo (Pernía, que dimitió por la presión popular) y, mientras,
la justicia aún debe decidir si devolver las acciones del club a un empresario
madrileño (Montalvo) que en su día las vendió a la desesperada. El día 15 de
noviembre puede ser decisivo. El racinguismo reza por un cambio de timón.
El caos no se agota en la dirección. Tiene su
prolongación en el terreno de juego. El arranque de temporada del Racing fue
caótico. El club destituyó a Juan Carlos Unzúe sin dejarle debutar en el
banquillo porque el contrato que le firmó su máximo valedor (tres años) no fue
aprobado por la Administración Concursal. Ahora, Fabri le sustituye en la hoguera. Y no le va nada mejor.
Vive en el alambre por haber heredado un equipo de retales a los que en su
mayoría ni conocía y tiene a toda la afición pidiendo su cabeza por su apuesta
futbolística y, sobre todo, por los malos resultados.
Adivinar lo que se va a encontrar el Alcorcón en El
Sardinero es sencillo. Un auténtico incendio contra el palco y contra el
entrenador del que sólo puede sacar beneficios. La plantilla está angustiada,
no hay fútbol en el que creer y la única consigna es defender con orden para
llegar con vida al final del partido. La calidad de la plantilla es muy justa,
los fichajes han aportado bien poco y la cantera ha contado más por necesidad
que por confianza. Sotres le ha quitado el puesto a Mario en la portería, el
único superviviente de este Racing de aquella eliminatoria que el Alcorcón
perdió en enero de 2010 tras los fallos de Juanma en casa (2-3) y la suerte
cántabra en la vuelta (0-0). Atrás, Francis es el jefe y capitán. Bocanegra,
internacional estadounidense, es el que tiene mayor jerarquía. En el centro del
campo, el único que ofrece algo distinto es Jorge Alonso. El equipo depende
demasiado de la velocidad de Jairo, del don del oportunismo de Andrija (máximo
artillero con tres goles) y de los destellos de Gai Assulin, ex del Barça.
Afición del Racing contra Alí. Foto: eldiariomontañes |
Fabri ha utilizado ya a 27 futbolistas en lo que va de
temporada. Un dato que evidencia que la inestabilidad del club se contagia a la plantilla. En Cantabria
ya suenan nombres para relevar al técnico. Su futuro, más que nunca, dependerá
de lo que el Alcorcón haga en El Sardinero ante un equipo que sólo ha marcado
siete goles en Liga. En su última visita, el 14 de enero de 2010, mereció ganar
sobradamente con Iñigo López en plan estelar, con un 60% de la posesión y
después de que le anularan un gol legal a Cascón. Es el momento ideal para
cobrarse la venganza...
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